La lectura, para que se convierta en un hábito, tiene que ser una fuente de diversión y placer personal. Obligar a los niños a leer es, por tanto, lo más contraproducente que se puede hacer en este sentido.
Como tutor de vuestras hijas e hijos, recomiendo que no les obliguéis a leer. Que lo hagan voluntariamente.
Dejo aquí un par de artículos de los muchos existentes en los que prestigiosas figuras de la literatura y de la docencia defienden esta postura. Ya me diréis:
Artículo I
Artículo II
PD: Por supuesto, la última decisión queda en vuestras manos. Un saludo.
PD2: El mejor incentivo para que vuestros hijos e hijas lean es que vosotros leáis con ellos. Los niños aprenden en gran medida por imitación de conductas: si ven al padre hacer una pizza, quieren hacer pizzas; si ven a la madre conducir, quieren conducir coches; si ven al abuelo trabajando el huerto, quieren trabajar el huerto. Si los niños os ven leyendo, si a los niños les leéis historias, si la lectura se convierte en una parte de vuestra vida diaria...ésta les acabará atrayendo (con todas las ventajas que ello conlleva a nivel de vocabulario, de construcciones gramaticales, de cultura general...)
PD3: Es muy importante conseguir textos que estén conectados con las motivaciones de vuestras hijas e hijos. Si a vuestros hijos les gustan las historias de cuentos de hadas, que las lean. Si les gusta el fútbol, conseguid títulos que hablen de fútbol; si les gusta la caza, conseguid títulos que cuenten historias de montería, de caza al salto...
Y finalmente, os dejo un vínculo con las 6 pautas para hacer que nuestros niños se habitúen a leer:
Cómo habituar al niño a la lectura
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